El padre obro por medio de sus Hijos en la creación de todos los seres celestiales. “porque por él fueron creados todas las cosas...Sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él”.
Antes de la creación de hombre, había ya ángeles; pues cuando los cimientos de la tierra fueron echados,
A una “alababan todas las estrellas del alba, y se regocijaban todos los hijos de Dios” después de la caídas del hombre, fueron enviados ángeles para guardar el árbol de la vida, y esto antes que ningún ser humano hubiese fallecido. Los ángeles son por naturaleza superiores al hombre. El propósito de Dios es que todo ser creado, desde el resplandeciente y santo serafines hasta el hombre, fuera un templo para que en el habitase el creador
Todos los seres creados viven por voluntad y el poder de Dios. Son receptores dependientes de la vida de Dios .desde el más sublime serafín hasta el ser animado más humilde, todos son renovados por la fuente de la vida.
Cuando Dios creó a estos seres (angélicos) para estar delante del trono, eran hermosos y gloriosos. Su benevolencia y santidad se comparaba con su exaltada posición. Estaban investidos de la sabiduría de Dios y equipados con la panoplia celestial.
Antes de la creación de hombre, había ya ángeles; pues cuando los cimientos de la tierra fueron echados,
A una “alababan todas las estrellas del alba, y se regocijaban todos los hijos de Dios” después de la caídas del hombre, fueron enviados ángeles para guardar el árbol de la vida, y esto antes que ningún ser humano hubiese fallecido. Los ángeles son por naturaleza superiores al hombre. El propósito de Dios es que todo ser creado, desde el resplandeciente y santo serafines hasta el hombre, fuera un templo para que en el habitase el creador
Todos los seres creados viven por voluntad y el poder de Dios. Son receptores dependientes de la vida de Dios .desde el más sublime serafín hasta el ser animado más humilde, todos son renovados por la fuente de la vida.
Cuando Dios creó a estos seres (angélicos) para estar delante del trono, eran hermosos y gloriosos. Su benevolencia y santidad se comparaba con su exaltada posición. Estaban investidos de la sabiduría de Dios y equipados con la panoplia celestial.
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